diciembre 23, 2009

Feliz Navidad


El pueblo que caminaba en tinieblas
vio una gran luz;
sobre los que vivían en tierra de sombras,
una luz resplandeció.

Engradeciste a tu pueblo
e hiciste grande su alegría.
Se gozan en tu presencia como gozan
al cosechar,
como se alegran al repartirse el botín.
Porque tú quebrantaste su pesado yugo,
la barrque que oprimía sus hombros y el
cetro de su tirano,
como en el día de Madián.

Porque un niño nos ha nacido, uno hijo
se nos ha sido dado;
lleva sobre sus hombros el signo del
imperio y su nombre será:
"Consejero admirable", "Dios poderoso",
"Padre sempiterno", "Príncipe de la paz";
para extender el principado con una paz
sin límites
sobre el trono de David y sobre su reino;
para establecerlo y consolidarlo
con la justicia y el derecho, desde ahora
y para siempre.
El celo del Señor lo realizará.

(Isaías 9,1-3. 5-6)

Oración Colecta

Dios nuestro, que cada año revives en nosotros
la gozosa esperanza de la salvación,
concédenos que, así como ahora acogemos a tu Hijo,
llenos de júbilo, como a nuestro redentor,
así también cuando venga como juez,
podamos recibirlo llenos de confianza.